He leído la novela “Calle Berlín, 109” de Susana Vallejo
En la calle Berlín 109 de Barcelona, parece estar la solución al enigma del asesinato de Pep, el compañero de Gerard Tauste, un mosso d'esquadra de la Comisaría de Les Corts de baja indefinida y por ello decide acercarse, a ese edificio modernista en pleno Eixample barcelonés. Pep había llamado a su antiguo compañero dos días antes de ser asesinado.
Allí viven un colombiano recién llegado a la casa, una prostituta de lujo, Gabriela, que no deja a nadie indiferente, un matrimonio de ancianos, Luisa y Zósimo, una madre separada, Encarna, con dos hijos Sandra y Alex, un oficinista soltero, Emilio y un fantasma: la anciana del último piso, María Eugenia, que murió hace meses, aunque nadie se ha dado cuenta.
Deseoso de vengar a su amigo, Gerard decide pasarse por allí. La búsqueda del asesino de Pep está rodeada de tantos misterios como vecinos hay en el edificio.
La novela es, también, un retrato social en el que descubrimos a unos personajes sumidos en la soledad, la indiferencia, la enfermedad, la violencia, las frustraciones, la rutina y la desesperación.